¿Qué hago con mi peludo cuando llueve?

Las lluvias torrenciales y los eventos climáticos adversos pueden cambiar nuestra rutina. Durante estos episodios, es crucial extremar la precaución.

Muchos animales se estresan con los truenos. No podemos explicarles lo que está pasando, pero sí acompañarlos para que noten que estamos cerca y que vamos a protegerles.

Nuestas mascotas están acostumbradas a pasear a ciertas horas, y su horario no entiende de condiciones climáticas adversas. En caso de que no sea una lluvia torrencial, si así lo estimas, puedes sacar a tu peludo. Para ellos, mantener la rutina de paseos es muy importante.

No te olvides de protegeros: paraguas y chubasqueros para los dos, siempre que se posible. Así prevendremos resfriados.

Si decides sacarlo a pasear, ten en cuenta si en tu ruta habitual pasáis por barrancos, cauces, parques o zonas inuldables. Evita las zonas que puedan suponer un riesgo. Si la lluvia es muy persistente o intuyes que puede empeorar, reduce el tiempo del paseo. Pronto saldrá el sol y podréis volver a disfrutar de una larga caminata.

Al llegar a casa, no te olvides de secarlo bien. Presta atención a los pliegues, patas y pelaje. Pon su cama en un lado cálido de la casa y evita que coja más frío.

Sigue siempre las recomendaciones y advertencias de las autoridades en cuanto a movilidad. Ante condiciones climáticas muy difíciles, lo mejor es quedarse en casa y entretener a nuestros peludos con juegos y mimos, mientras esperamos a que amaine la tormenta para retomar los paseos.